Hotel único, nos ha gustado un montón todo.

Un personal agradable, la habitación era práctica, con un buen diseño y encantadora y romántica, con aire acondicionado, acceso al jardín y además una ducha. El aeropuerto Burdeos-Mérignac estaba a apenas 20 minutos en coche.

Un alojamiento boutique fabuloso romántico. La habitación en sí era bien dispuesta, contaba con una ducha y también camas cómodas. Personal excelente y extremadamente amable durante toda nuestra estancia. El desayuno era delicioso y tenía una enorme variedad de comida. Los servicios eran muy buenos. Además, aparcamos el auto en la propiedad.

Nos ha encantado su ubicación, realmente encantadora y estupenda, y el personal, complaciente. La suite tenía un minibar, una caja fuerte y una chimenea, todo funcionaba perfectamente.

La ubicación del hotel era perfecta, cerca de varios puntos de interés. La habitación era acogedora y la cama muy cómoda. Además, el personal del hotel fue muy amable y servicial.

La limpieza dejaba mucho que desear, la habitación no estaba bien mantenida y encontramos suciedad en varias áreas. El baño también presentaba problemas, con el WC y la ducha sin funcionar correctamente.

En general tiene una ubicación realmente encantadora lo suficientemente cerca de muchas tiendas y restaurantes, de las principales atracciones de la ciudad, del centro de la ciudad. El personal es bastante agradable y complaciente, se aseguran de que pases unos días súper agradables aquí. Me ha gustado el ambiente del hotel, tranquilo. Habitaciones preciosas y lo suficientemente espaciosas con acceso al jardín con servicios atentos...

Nos han gustado un montón sus habitaciones con acceso al jardín. La ubicación era perfecta, el Gran Teatro de Burdeos estaba a un agradable paseo del hotel.

Nos encantó la ubicación del hotel en un barrio tranquilo y tan cerca de todo. Está cerca del centro de la ciudad y en un bonito y tranquilo barrio. Además, el hotel cuenta con un parking a precio especial para los huéspedes, lo cual fue muy conveniente para nosotros.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

En la habitación había un televisor de pantalla plana, un refrigerador minibar y una mesa de trabajo y la cama era súper cómoda. Un desayuno delicioso con los mejores cruasanes, un personal atento.

La ubicación fue fantástica, muy céntrica pero también muy tranquila. El edificio y la decoración interior estaban estupendos. El personal fue inmejorable. Sin duda, repetiré la experiencia.

Me sentí realmente atendido, no tengo ninguna razón para quejarme.

Un lugar encantador y único, con una ubicación ideal cerca del centro de la ciudad y del casco antiguo, además de estar cerca de todas las atracciones principales. 🌟

El personal es muy servicial, el propietario también. Ofrece una ubicación céntrica, cerca de una catedral y un teatro. Además, está en una calle tranquila.

La decoración de Villa Victor Louis - Bordeaux Centre es simplemente espectacular. Desde el momento en que entras, te sientes transportado a una villa francesa acogedora y encantadora. El ambiente es tranquilo y relajante, lo cual nos permitió disfrutar de un sueño de calidad en un entorno sereno. Además, la ubicación céntrica del hotel nos permitió ir caminando a todos los lugares que queríamos visitar. El desayuno también fue muy satisfactorio y nos ofreció una buena selección de alimentos.

El armario en nuestra habitación era bastante pequeño y no pudimos guardar todas nuestras pertenencias. También notamos que la limpieza no era la mejor, especialmente en el jardín donde encontramos mosquitos muertos en las paredes.

La ubicación del hotel es fantástica, muy céntrica pero tranquila al mismo tiempo. El edificio es elegante y la decoración interior es estupenda. El personal fue inmejorable, siempre amable y dispuesto a ayudar. El pequeño comedor en el hotel era ideal, luminoso y precioso, perfecto para desayunar. A pesar de algunas pequeñas quejas sobre la falta de café y la falta de ayuda con las maletas, en general, tuve una experiencia muy grata en este hotel. En definitiva, recomendaría este hotel sin dudarlo.

Excelente hotel para pasar unos días. Es sentirse en otra época con todas las comodidades actuales. La ubicación es perfecta y el personal amable. La decoración es exquisita y cuenta con todas las comodidades necesarias. Además, el desayuno es delicioso, con zumo natural y un brioche delicioso.

El único inconveniente es que no tiene ascensor, lo cual puede ser complicado para personas con movilidad reducida o con carritos de bebé.

Este encantador hotel está situado en el corazón de la ciudad, en un tranquilo barrio residencial. Además, se encuentra cerca del centro de la ciudad y del casco antiguo, lo que facilita el acceso a varios lugares para comer y disfrutar de la vida nocturna. Las habitaciones son hermosas y las camas son realmente cómodas. El personal es amable y el desayuno ofrece una gran variedad de opciones deliciosas, como zumo natural y brioche fresco.

El hotel no cuenta con ascensor, lo que puede resultar incómodo para personas con movilidad reducida o con mucho equipaje.